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Felicitations, Julia Ducournau por este esfuerzo y que haya muchos más: tienes mucho que ofrecer en pantalla.
(Grave / Raw, Francia-Bélgica, 2016. Dir. y guionista: Julia Ducournau. Color, 99 min. Viaje por el terror del surgimiento de un instinto brutal.)
Eduardo Mórlan / Kormoran13
Los temas que más terror pueden causar son aquellos en los que podemos constatar la cercanía de ellos a nuestra vida cotidiana y que van en contra de muchos cánones implícitos y explícitos. ¿Un ejemplo? El incesto... y otro, el que se menciona abajo.
Se sabe que en la selva profunda de Nueva Guinea todavía existen seres que son cazadores de cabezas y caníbales. Igualmente sabemos que muchos asesinos seriales proceden a comerse partes de sus víctimas y existen creencias que esas prácticas son una manera de aprovechar la fuerza de un enemigo, como la hace el indígena Magua con el corazón del coronel Munro en "El último mohicano" (Last of the Mohicans, dir.: Michael Mann, 1992). Los esquimales se comen el hígado de una víctima para que su alma no pueda avisar de su muerte ni estar en paz en ultratumba.
Este tema ha sido explotado extensivamente en la historia del cine: tenemos el caso del film mexicano "Supervivientes de los Andes" (Dir.: René Cardona, 1976), su refrito yankee llamado "Viven" (Alive, dir.: Frank Marshall, 1993) y el ejemplo reciente de "El demonio neón" en el que la virtud es literalmente devorada por el vicio. Rematamos con "Somos lo que hay" (Dir.: Jorge Michel Grau, 2010).
Bueno, pues entonces ahora la guionista y directora Julia Ducournau (JD) decide retomar el tema... pero de forma diferente: veamos lo que "Voraz" nos describe en pantalla.
EL ARGUMENTO
Justine (Garance Marillier) es una joven de 16 años que es llevada por su padre (Laurent Lucas) y madre (Joana Preiss) a la universidad de veterinaria donde ellos estudiaron y su hermana mayor Alexia (Ella Rumpf) ya reside.
Nos enteramos por una parada en el camino donde comen que la familia es vegetariana.
Justine comparte habitación con Adrien (Rabah Naït Oufella), un joven homosexual y juntos deberán pasar la humillación del estúpido ritual de la novatada o perrada, en la que los imbéciles alumnos veteranos se ensañan con los recién llegados.
Justine es obligada a comer un trozo de riñón de conejo y eso la enferma seriamente con una dermatitis impresionante. La enfermera (Marion Vernoux) le quita la epidermis dañada y le aconseja calma.
Justine se crea mala fama siendo una alumna excepcional y debe seguir soportando el maltrato de los veteranos. Sin embargo, poco a poco comienza a descubrir una pulsión irresistible que le provoca la carne que nunca antes ha probado.
El resto del film trata del descubrimiento y desarrollo de un hábito que tiene del que nunca sospechó.
UN INICIO DE ANTOLOGÍA
El film abre cuando Justine avanza por una carretera recta flanqueada por árboles y al escuchar que un auto se acerca, sale de improviso y provoca algo inesperado. Esto nos sirve de advertencia de lo que seremos testigos a lo largo de la trama de esta historia.
Justine es un personaje que tiene puntos en común al principio con "Justine o los infortunios de la virtud" del Marqués de Sade y precisamente la pérdida de su virginidad va a ser un punto clave en el desarrollo del relato, aunque no será violada como en la novela mencionada, sino todo lo contrario.
Para complementar este panorama, Alexia muy bien pudiera haberse llamado "Juliette o el vicio ampliamente recompensado" del mismo autor mencionado arriba, si bien el vicio que tiene ha sido guardado celosamente, aunque sus consecuencias son visibles para otros.
La escena en que Alex fuerza a Justine a comer un trozo crudo de hígado de conejo me rememoró la misma que se puede ver en "Merry Christmas Mr Lawrence" (Dir.: Nagisa Oshima, 1983), donde Jack Celliers no defiende a su débil hermano de la ilógica chusma estudiantil y lo obligan a cantar.
TEMAS TRATADOS
Ante todo, es el abandono de la inocencia y el refugio del hogar familiar, así como el brutal despertar al mundo real en donde la gente se convierte en gentuza por los roles que les impone una serie de convenciones hirientes e injustas.
Con esto viene la propia autodefinición como individuo, las elecciones que esto conlleva, la búsqueda de aceptación y el despertar sexual. Ha habido un distanciamiento de los progenitores que se explica en la escena final, cuando se descubre que se ha guardado un secreto celosamente por parte del padre.
En las historias medievales, siempre se sacrifica una virgen a lo que amenaza a una comunidad, como lo es un dragón, pero acá todo funciona al contrario en ese aspecto.
REFERENCIAS QUE DEJAN HUELLA
Esta cinta comparte el título mexicano con "Voraz" (Ravenous, dir.: Antonia Bird, 1999) y que nos remite a lo que se menciona de pasada en "El resplandor" (The Shining, dir.: Stanley Kubrick, 1980) de la caravana que queda aislada en la nieve y se lanza a sobrevivir rompiendo cánones.
Igualmente, la trama resulta muy semejante a la de "Sangre caníbal" (Trouble Everyday, dir.: Claire Denis, 2001), con la diferencia que en ésta todo se explica como una enfermedad, pero en "Voraz" todo se deriva de un impulso oculto y peligroso que se descubre accidentalmente, como sucede "En mi piel" (Dans ma peau, dir.: Marina de Van, 2002).
El saborear el placer y la experiencia que la carne genera en el sexo se asemeja a lo que le sucede a Natassja Kinski en la 2ª.
UN BUEN INICIO Y UN MAL FINAL
Con un inteligente tema que es reforzado por la exagerada mala fama de que en sus premieres hubo desmayados recogidos en ambulancias, "Voraz" apunta rápidamente para convertirse en obra de culto para un público específico que ha sido hábilmente manipulado por los medios de comunicación con lo que publican de ella.
Creo que la película no requería de este tipo de gimmicks para poder destacar, pues tiene todo el potencial para convertirse en un éxito instantáneo.
Esto resulta un tanto lamentable, pues podemos ver la manera en que las nuevas generaciones deciden hacerse ídolos de pies de barro, como ha sucedido con la obra de Irvine Welsh, el profeta de la basurera estética estercolera que ha roto récords en Cineteca Nacional al presentarse su adaptación cinematográfica de "T2 Trainspotting 2" (Dir.: Danny Boyle, 2017) y con venta total de boletos apenas se abren las taquillas en viernes para toda la siguiente semana.
Esta función de prensa ha sido la más concurrida hasta el momento y resultó sorprendente ver a muchos "reporteros" que hacen gala de ignorancia y dan sus poco válidas "opiniones" a voz en cuello en las funciones de prensa de mamarrachadas comerciales, en las que compiten a ver quién dice más idioteces, como si se preparan para el campeonato mundial de retraso mental.
Estos mencionados son los que se aparecen en Cineteca Nacional cuando se les programan obritas que están al alcance de su lamentable nivel intelectual, como son las regresiones infantiloides de Hayao Miyazaki o la bazofia pastichera de Quentin Tarantino. Resulta lamentable ver el tipo de ilusiones y gustos que tiene esta gente y para rematarla, el que se les fomentan con lo que se les ofrece.
No quitándole su mérito, "Voraz" resulta menos impresionante en lo terrorífico muy bien basado en una mentalidad enfermiza que ofrecía "En mi piel", de la cual recuerdo que una buena parte de la asistencia a la función de prensa salió por piernas antes de terminar su primer tercio.
Criticable resulta el recurrir al igual que en "La bruja" (The Witch, dir.: Robert Eggers, 2015) a sonidos efectistas -la "música" de Jim Williams- para crear "tensión" en el público, cuando lo que vemos ya es lo suficiente perturbador para alterar a una gente del común.
EL CASTING
La elección de Garance Marillier en el papel principal es muy afortunada, pues la chica yace entre los extremos de la dulce inocencia y lo brutalmente desatado, siendo este paso muy afortunadamente ejecutado y completamente creíble. Debuta en 2011 en el cortometraje "Junior", dirigido por JD coincidiendo en el papel de Justine y repiten su colaboración en el TFvilm "Mange" de 2012. Se le vio en 2013 en My French Film Festival en el cortometraje "No es una película de vaqueros".
Rabah Naït Oufella como Adrien resulta ser un elemento que incluye discontinuidad en un relato que aparentemente describe seres normales y que en cambio nos muestra una serie de circunstancias extraordinarias que derivan en situaciones espeluznantes.
Ella Rumpf se lleva la palma al aparecer al principio como una presencia menor hasta llegar a superar en el último tercio a su hermana, una vez que muestra el terrible poder que posee.
Por lo que se refiere a los adultos, contamos con la experiencia de Laurent Lucas, que recientemente aparece en papeles de corta duración y que nos sorprendió con su actuación en "Aleluya" en un estilo visual y narrativo muy semejante a la cinta analizada.
Joana Preiss también impresiona en sus cortas apariciones, al igual que la directora Marion Vernoux -exesposa de mi nunca bien ponderado Jacques Audiard- como la enfermera y el versátil Bouli Lanners como el trailero sexoso.
JD nace en 1983 y a los 20 años obtiene en la Sorbona el doble diploma de Letras Modernas. Un año después, entra a la FEMIS a la facultad de Guionismo y participa en un taller de escritura de guión en la Universidad de Columbia, impartido por Israel Horowitz, para graduarse en 2008.
Como guionista* JD tiene 4 trabajos: "Pour Anna" (tesis para La Fémis, 2008) y "Ni le ciel ni la terre" (2015). Como directora, lleva 5 films en su activo: "Corps-vivants" (2005), "Tout va bien" (2007), las ya mencionadas "Junior"* y "Mange"* (TVfilm codirigido con Virgile Bramly para Canal+), ambas de 2011 y la cinta analizada en este artículo.
JD incursiona en un género cinematográfico reservado a los hombres y eso la hace notoria en este terreno. Su cinta se lleva varios premios en varios eventos, como los del Festival de Cine de Londres y el Festival Internacional de Cine de Palm Springs, además del galardón FIPRESCI en la Semana de la Crítica de Cannes donde se estrena mundialmente el 14 de mayo de 2016, entre otros.
En EU se deja ver en el Festival internacional del Film de Chicago y en el Festival de Sundance. La película se estrena en Francia el 15 de marzo de 2017, donde acuden 62, 340 espectadores en 79 cines, con un promedio de 789 personas por cine.
El escándalo surge el 13 de septiembre de 2016 al estrenarse en el TIFF, en donde algunos espectadores se desmayan y son llevados en ambulancia. De acuerdo a Ryan Werner, que publicita la cinta, no había habido una reacción de este tipo luego de presentar "Anticristo" (Antichrist, dir.: Lars von Trier, 2009).
La colaboración técnica en esta cinta es de Ruben Impens en la fotografía y la edición de Jean-Christophe Bouzy. Se inicia el rodaje el 3 de noviembre de 2015 en Bélgica y dura 38 días. La clínica veterinaria de la Universidad de Lieja es el escenario principal. El film es financiado por entidades francesas y belgas, tales como Rouge International y Frakas Productions con un presupuesto de €3.5 millones.
La prensa opina por medio de Jeannette Catsoulis de "The New York Times": "Voraz es una ópera prima sorprendente y audaz, la cual incorpora el canibalismo en una estructura de caos ambiental y disfunción familiar, donde no hay amor ni consuelo".
CONCLUSIÓN
"Voraz" es un ejemplo de un cine que maneja un tema insólito de manera mesurada pero que ha recurrido a convertirse en show para generar curiosidad en un público específico mediante la publicidad escandalosa. No se le quitan los méritos a la directora JD en este debut en su forma de concebir el tema y desarrollarlo, pero es innecesario rodear a la película -ya buena de por sí- de este halo de superficialidad.
Cine Caníbal participa por partida doble en esta Muestra con la cinta analizada y "Yo, Daniel Blake" y se le agradece el poner en pantalla ambas cintas.
No queda más que recomendar ampliamente que vean esta película en el marco de la 62ª. Muestra de Cineteca Nacional para que se formen su propia opinión. Vale la pena sin todo el falso oropel escandaloso de que se rodeó.