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Cada vez más personas están usando las sillas de baño, debido a sus grandes ventajas, descubre todo sobre ellas
Una buena parte de los problemas que se generan cuando hablamos de lesiones de ortopedia que impiden a las personas valerse por si mismas se deben al impacto psicológico que tiene el hecho de necesitar a otra persona para realizar literalmente cualquier actividad, es importante que siempre podamos sentirnos bien con nosotros mismos en nuestro día a día y es por ello que el uso de artículos ortopédicos como las sillas de ducha se ha popularizado, ayudan muchísimo a levantar la moral y esto causa un efecto positivo en las vidas de las personas que las utilizan, puedes ver aquí más sobre estos artículos ya mismo aquí
Un asiento de ducha es un asiento para la bañera o la ducha. Estos asientos están pensados para las personas que no pueden estar de pie al ducharse y, por tanto, deben sentarse. El uso de asientos de ducha permite a los ancianos y a las personas con movilidad reducida lavarse por sí mismos o ser asistidos. Algunos asientos de ducha son adecuados tanto para duchas lentas como para duchas de bañera, mientras que otros no lo son. Aunque todos los asientos de ducha tienen patas metálicas, existen diversas variaciones.
La mayoría de los asientos de ducha son de plástico, pero algunos tipos más inusuales tienen asientos de teca. La teca es conocida por su buena resistencia a la humedad; muchos accesorios de baño de madera están hechos de este material. Las patas del asiento de la ducha son de metal, y la mayoría de ellas son ajustables en altura. Las patas elásticas suelen tener puntos de atracción en la parte inferior para una mejor fijación al fondo de la ducha o bañera.
Los asientos de ducha ayudan muchísimo a subir la autoestima de quienes los usan
El asiento de plástico de la mayoría de los asientos de ducha tiene aberturas de agarre en cada lado. Un asiento de ducha con respaldo también tiene una abertura de agarre en el punto más alto del respaldo. Los asientos de ducha están disponibles con o sin respaldo. Muchos asientos de ducha tienen grandes aberturas en el asiento para permitir que el agua drene en lugar de acumularse en el asiento. Algunos asientos de ducha están acolchados, pero la mayoría no lo están.
Los asientos de ducha suelen venderse desmontados, pero no son difíciles de montar. Muchos asientos de ducha no requieren herramientas adicionales, como destornilladores, pero sí tienen tornillos que deben estar bien sujetos. Aunque la mayoría de los asientos de ducha son adecuados tanto para bañeras como para duchas lentas, es aconsejable leer la etiqueta antes de comprar un asiento. Los asientos de ducha sólo deben introducirse de acuerdo con las directrices de la designación del artículo. Un asiento de ducha debe ser duradero y utilizarse tal y como se indica en el envase para que no se vea comprometida la comodidad.
El peso máximo que la mayoría de los asientos de ducha pueden soportar con seguridad es de 300 lbs. (136 kg). Las patas de los asientos de ducha suelen ser de aluminio inoxidable. El aluminio es un metal ligero pero duradero. Los asientos de ducha portátiles están diseñados para ser llevados de un lado a otro; se pueden plegar para reducir su tamaño. Los taburetes de ducha son redondos, sin respaldo y suelen tener patas similares a las de otros asientos de ducha.