El bello Sánchez no tiene límites, es un golfo desahogado cuya vanidad le lleva a pensar que puede hacer de "su capa un sayo" y ejecutar los asuntos de sus ciudadanos a su antojo, sin pararse a contemplar el mal o daño que les puede ocasionar. El presidente sabía el 4M que tenía que elevar las medidas para combatir el coronavirus, pero no actuó hasta que pasó el 8M, era más importante para el la mamarrachada de las titiriteras feminazas, que la protección de la vida de los ciudadanos. Hasta ahora, todo era una estupidez que los mentecatos vocales del anormal gobierno, podían solucionar con la gorra. Cansados estábamos ya, de escuchar a botarates afines al gobierno social comunista, desbarrar contra este virus, diciendo que no pasaba nada, solo era una gripe más y a indocumentadas del partido podemita, apoyadas por ineptos periodistas, como el soez Mejide, quitando importancia a este virus que, por aquella época, ya estaba causando estragos en Italia y otros países de la comunidad europea. Las medidas que tomaban estos países eran exageradas, no contaban los muertos y contagiados que estaban sucediéndose. Cerraban colegios y campos de fútbol y todo le parecía un juego a nuestros gobernantes. En Ha ro se cierra la puerta a todo el mundo, en Madrid un tanto de lo mismo, y otras ciudades como Barcelona, Vitoria, corren el mismo riesgo. ¿Cuánto vale la vida de los ciudadanos para este ególatra ignorante frescales? Está visto que nada o muy poco, solo le importa como mantenerse en el poder y poder viajar en avión. Es un impresentable que no tiene nada que hacer en el puesto que ostenta. Es usted un insensato en manos de unos egoístas truhanes sediciosos y traidores. Déjelo mientras pueda, no tiene ni credibilidad, ni remedio. ¡Felón!