¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Redacción Política escriba una noticia?
El presidente del gobierno, Mariano Rajoy, anunció este miércoles que se reunirá con los líderes de la oposición socialista y de Ciudadanos para tratar una eventual declaración independentista del parlamento de Cataluña.
"Me voy a reunir, ayer hablé con Pedro Sánchez (secretario general socialista) y hablé con el señor Albert Rivera (líder de Ciudadanos)", declaró Rajoy en una entrevista con la radio Cadena Ser donde fue preguntado sobre una hipotética reunión de los grandes partidos españoles sobre Cataluña. Rajoy la confirmó, pero no anunció la fecha: "Se la anunciaré después de que se celebre".
La reunión debería servir para encontrar una respuesta común ante esta crisis, agravada el martes por la presentación en el parlamento catalán de una resolución independentista que, de ser aprobada, lanzaría un proceso de secesión que culminaría, como máximo, en 2017.
El texto, con nueve puntos, insta al ejecutivo catalán a iniciar esta separación y prevé la tramitación en los próximos 30 días de leyes para crear una administración fiscal y un sistema de seguridad social independientes.
Además, declara que el parlamento catalán no se someterá a las decisiones del Estado español, "en particular del Tribunal Constitucional", con lo que podrían desacatar una eventual decisión de esta instancia judicial invalidando la resolución.
"No se va a cumplir lo que dice ese documento", insistió este miércoles Rajoy, en plena campaña para obtener un nuevo mandato tras las elecciones legislativas del 20 de diciembre. "El gobierno sabe muy bien lo que tiene que hacer", se defendió ante las críticas que denuncian "un vacío de poder", aunque sin precisar las medidas que tomará. "Vamos a aplicar la ley y no vamos a entrar en detalles". "Estén ustedes tranquilos, la ansiedad no resuelve los problemas (...) Habrá que dar respuesta siempre con prudencia y con proporcionalidad", añadió.
Los independentistas querían aprobar esta resolución la próxima semana, antes de producirse el 9 de noviembre la primera votación para eventualmente volver a escoger como presidente a Artur Mas, quién por ahora no dispone de los apoyos necesarios. Sin embargo, su tramitación se paralizó este miércoles porque el Partido Popular todavía no ha constituido formalmente su grupo parlamentario en la cámara autonómica. En ella, los independentistas disponen de una mayoría absoluta de 72 de 135 escaños divididos entre la transversal coalición Juntos por el Sí de Mas (62 diputados) y la izquierda anticapitalista CUP (10).
La fecha límite de esta constitución es el 5 de noviembre y el grupo conservador ya anunció que intentará "agotar todos los plazos" para trazar una posición común con Ciudadanos y el partido socialista. Estas formaciones reclamaron por separado al órgano rector de la cámara autonómica que rechace la tramitación de la resolución porque "vulnera la legalidad de forma evidente".
Incluso, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, principal fuerza de la oposición, pidió "al gobierno de España que recurra ante el Tribunal Constitucional la resolución" antes de ser debatida.