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El Gobierno Bolivariano a través del Ministerio del Poder Popular para la Cultura, mediante la Plataforma de las Artes de la Imagen y el Espacio se une al duelo que consterna al universo de las artes plásticas nacional, desde el pasado viernes 26 de noviembre, con la desaparición física del maestro Luis Guevara Moreno.
Considerado el grabador más prolífico que ha tenido Venezuela, sobre todo en lo que a litografía se refiere, este artista plástico oriundo de Valencia, estado Carabobo, nació un 21 de junio de 1926.
Amigos, colegas y pupilos lo recuerdan con un afecto entrañable, evocan al maestro Moreno como "un excelente ser humano, taciturno, callado, no le gustaba hablar mucho, dedicado con pasión a su trabajo".
Era celoso con los secretos del grabado, los cuales guardaba y no revelaba a todo el mundo, al punto que no le agradaba que le tocaran herramientas y planchas de trabajo. Él mismo imprimía sus grabados
Este venezolano a carta cabal amaba a su Patria, defendía raíces y tradiciones, inmerso en el más profundo sentido de identidad nacional.
Signado por su compromiso social emprendió una interesante labor como promotor en la Escuela Bolivariana "José Martí", institución en la cual transmitió conocimientos a los más jóvenes a través de talleres y charlas.
En su trayectoria docente dejó igualmente huellas. En el devenir profesional se desempeñó como Director de la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas, figuró como miembro fundador del Taller de Artistas Gráficos, TAGA y perteneció a la directiva de la Asociación Venezolana de Artistas Plásticos (AVAP).
Entre los numerosos reconocimientos recibió los Premios Nacionales de Pintura en el año 1959; así como de Dibujo y de Grabado, éstos dos últimos obtenidos en 1969.
Parte de su trabajo giró en torno a la represión en la época de la dictadura. Su arte deleitó al público a través de innumerables exposiciones individuales y colectivas que realizó tanto a nivel nacional como internacional.
Prolijo en su legado, su obra vivirá por siempre. Deja una estela signada sobre todo por las huellas del excelente ser humano que fue.
Paz a sus restos.
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Mgter Teresa Quilez
Coordinadora de Prensa del IARTES