La Unión Europea planea organizar una cumbre extraordinaria sobre migraciones ilegales, tras el naufragio en el Mediterráneo en el que se teme murieron 700 personas, indicó este domingo el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.

"Hablé con el primer ministro (maltés Joseph) Muscat. Discutiré con otros dirigentes de la UE para buscar una solución a esta situación", señaló Tusk en Twitter. El portavoz de Tusk, Preben Aamann, precisó que tras esas consultas "tomará un decisión para convocar a una posible cumbre extraordinaria".

Más temprano, el jefe de gobierno italiano, Matteo Renzi, reclamó una cumbre europea urgente.

"Estamos trabajando para asegurarnos de que esa reunión se podrá celebrar antes del final de la (próxima) semana. Tiene que ser una prioridad", dijo Renzi en rueda de prensa, calificando la crisis migratoria de "azote" que Europa debe afrontar.

El balance oficial es de 24 muertos y 28 supervivientes, pero varias personas que viajaban a bordo aseguraron al Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU (ACNUR) que unos 700 pasajeros se encontraban en el barco cuando se hundió.