¿En qué momento perdimos la memoria? Las anécdotas contadas sobre nuestra historia nos revelan un pasado distópico. Días de incertidumbre, de exilio, de desaparición. ¿Cómo se gestó esa historia? Libros de texto, nos cuentan los desastres vividos, pero no que todo eso fue la consecuencia de la inseguridad y la insatisfacción general anterior. Los hechos suelen ser consecuencias de hechos que los causaron. Nada se da porque sí. Si bien nada excusa un acto tan repudiable como los cometidos, ignorar las causas que llevaron a ese momento solo nos hace repetir la historia. Entonces, ¿Que nos puede salvar de caer en los mismos errores? Eso es simple, la memoria y no esperar que los causantes de ese momento nos salven, haciendo lo mismo que, no solo no funcionó en el 2020, si no que nunca funcionó. 

Argentina, un país que entró y salió de gobiernos militares durante varias décadas, es un país lleno de gente que ignora que en gran parte de esos gobiernos estuvo involucrado cierto nefasto general. En el presente, opositores son tildados de fachos, nazis, golpistas, por gente que o ignora el pasado real del país o que está tan adoctrinada que no sabe lo que esas palabras quieren decir. Esa misma gente que señala con el dedo y escupe esas palabras ignora que nazi es por partido nacionalsocialista, ignora que dicho general apoyaba las ideas de Mussolini( gestor del fascismo) y hasta, en casos extremos, llegan a negar que el general haya sido militar. 

Como resultado de la ignorancia y el adoctrinamiento tenemos gente que cree que el hombre que causó varios golpes de estado fue el mejor presidente de la nación. Gente que perdió la noción de lo real y se cree que se puede legislar por medio de emociones y sentimientos. Gente que se cree que el pobre es pobre porque el rico es rico. Gente a la que se le enseña que el "neoliberalismo" represor tiene la culpa de todo. Gente que llama a los empresarios cómo oligarcas. Gente que ignora que los que más se enriquecieron en el último tiempo en la Argentina son las personas que viven de los impuestos. Gente que se cree que lo que no funcionó en ningún lado acá puede funcionar.

Los culpables de la realidad argentina no son las empresas que no fuerzan a nadie a consumir su producto, no son los liberales represores, porque tal cosa no existe(¿Cómo alguien que defiende la libertad va a reprimir?). Los responsables son los facistas que se creen que un concurso de popularidad los avala a robarnos, a estafarnos.