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La entidad ha finalizado el proyecto de instalación de placas fotovoltaicas en la cubierta del Hospital Mutua Montañesa de Santander, con el objetivo de permitir un ahorro de costes y de reducir el impacto medioambiental negativo hacia el Planeta
Mutua Montañesa, mutua colaboradora con la Seguridad Social número 7 y con más de un siglo de vida dedicado a la gestión de la salud laboral de sus empresas y trabajadores, ha concluido la instalación en su Hospital Mutua Montañesa, en la ciudad de Santander, del nuevo suministro de energía eléctrica a través de paneles fotovoltaicos, con la idea de economizar el consumo y reducir las de emisiones CO2.
Además de la mencionada instalación, y como parte del proyecto mejora de eficiencia energética y mantenimiento, se ha llevado a cabo la sustitución del sistema actual de climatización de la piscina por aerotermia, y se ha cambiado la actual enfriadora por una nueva máquina, así como la actual caldera de gas por una de biomasa. También se han instalado aireadores y reguladores en los grifos de los lavabos y duchas de las instalaciones, y se ha implantado un sistema centralizado VRV de climatización.
El conjunto de todas las medidas propuestas implicará un ahorro que ronda los 25.242 euros anuales en el complejo hospitalario, y que ayudará a mejorar el entorno medioambiental.
Tal y como recalca Ana Isabel Manso, Coordinadora de Dirección General y RSE: “Como organismo comprometido con el entorno y la sociedad, la mutua integra acciones que aportan su granito de arena en la lucha contra el malgasto energético. Se reafirma así nuevamente nuestro compromiso con el medioambiente, a través de la aplicación de proyectos y medidas concretas que tienen un impacto real en la reducción de emisiones nocivas para el planeta”.