Hace ya más de un mes tuvo lugar el E3, el gran evento de la industria del videojuego, una semana llena de anuncios y emoción que este año ha sido especialmente interesante. Con una Microsoft sólida, una Nintendo errante y una Sony arrolladora que ha recurrido a la nostalgia para jugar sobre seguro (Shenmue, Final Fantasy VIII...), me habría encantado poder ir a Los Ángeles o, al menos, dedicarle varios artículos a la feria.

Sin embargo, hasta ahora no había escrito ni una sola palabra al respecto. Por primera vez en unos diez años, quizá más, no he publicado nada sobre el E3. No tuve oportunidad, pero tampoco tenía sentido hacerlo. En los dos últimos años, a medida que mi actividad profesional se ha ido diversificando (cine, arte, gastronomía...), este blog ha ido cayendo en el olvido, languideciendo poco a poco.

Intenté resucitarlo en varias ocasiones, siempre sin éxito. Si no sacaba tiempo para jugar, ni siquiera para estar al día de la actualidad del sector, ¿cómo iba a escribir sobre ello? Recuerdo la ilusión y las ganas con las que comencé a escribir 20 Hit Combo allá por 2008 y se me parte el alma al descubrir lo lejos que ha quedado aquello y todo lo que se ha perdido por el camino.

No tenía sentido seguir. Un blog es parte de uno mismo, un pedacito de vida, un cúmulo de experiencias y opiniones que decides compartir con todo aquel que quiera leerte. Cuando ya no hay nada que compartir o no existen ganas de hacerlo, el blog no significa nada. Incluso este post de despedida se me ha resistido semanas y semanas, pero finalmente está aquí.

Quizás no sea un adiós definitivo, quizás vuelva en el futuro con muchísimas ganas y mejores ideas, pero de momento este es el final, la última parada de un largo y bonito camino en el que he disfrutado muchísimo. Mil millones de gracias a todos los que me leyeron algún día (los fieles lectores de los primeros años y los casuales de años siguientes) y muy especialmente a todos los que han comentado en alguna ocasión, incluyendo por supuesto a los más críticos.

¡Felices partidas a todos!, ¡nos vemos en los recres!