Fiat Chrysler Automobiles está retirando en EEUU alrededor de 1.200 Dodge Charger y Challenger SRT Hellcat por preocupaciones que, tal y como especifica la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), existe un problema en el material del manguito de caucho usada en la línea del radiador del aceite del motor, que puede romperse y provocar una pérdida masiva y repentina del mismo. El resultado ante esto son dos escenarios muy no óptimos: aceite rociado en el parabrisas que bloquee la vista del conductor, o que el aceite entre en contacto con una superficie caliente en el compartimiento del motor y te marques unas fallas. En cualquier caso, así por lo general, que un coche pierda aceite no es bueno de cara a que dure.

FCA presentó documentos a la NHTSA relacionados con la retirada de los susodichos modelos el 8 de agosto, que fueron revisados y confirmados oficialmente esta semana por la institución.

Según el fabricante, los Charger y Challenger SRT Hellcat construidos entre el 6 de febrero y el 30 de mayo de este año están equipados con un conjunto defectuoso de manguitos que podría fallar en cualquier momento

Obviamente, una pérdida súbita y completa de presión de aceite en el motor V8 de 717 caballos podría causar daños internos severos por gripado. Pero el riesgo de incendio y/o visión del conductor obstruida es aún más grave en su capacidad de causar un accidente que podría lesionar al conductor u otras personas en la carretera.

Afortunadamente, la compañía dice que no sabe de ningún accidente o lesiones causadas por el defecto. Según los documentos, no hay otros modelos FCA afectados, ya que los ingenieros fueron capaces de rastrear ese lote de mangueras de goma hasta los Hellcat específicamente construidos en el plazo establecido. El retiro está programado para comenzar el 22 de septiembre, momento en el cual los concesionarios intercambiarán los manguitos del radiador de aceite del motor afectadas de forma gratuita. ¿Demasiado tiempo quizá?