Todos estamos en el barco llamado Venezuela,

no vivimos en guetos,

no somos parias,

nuestro territorio se extiende infinitamente como el concepto de Patria,

podemos transitar libremente.

Es mi país, Venezuela,

con el cielo más azul de América,

no somos seres de petróleo,

nuestra riqueza está en nuestra esencia,

en el trabajo continuo,

no somos consignas de ningún partido único,

somos nosotros quienes debemos construir nuestro camino.

El socialismo o cualquier sistema o forma de gobierno,

que pensemos,

o maduremos en nuestra vida cotidiana,

no puede estar por encima de mi concepto de libertad,

el Estado debe respetarme porque yo le di el poder,

podría quitárselo cuando quiera,

no canten victoria ni se sientan tan seguros, el poder reside en el pueblo,

no permanece para siempre en sus gobernantes de turno,

es efímero como la vida,

cambiante como las estaciones.

Vivimos en Venezuela pero parecemos presos,

llenos de temor,

por la delincuencia tanto interna como externa,

se ha convertido en una forma de ser del Estado,

el atropello,

la inacción,

la ineficiencia,

la agresión

y la violencia.

Siento que me quitan cada día a mi patria,

la desmontan por así decirlo,

tienen sus leyes para hacerlo,

dicen que es legítimo crear una estructura legal que anule cada vez más al

El Estado debe respetarme porque yo le di el poder, podría quitárselo cuando quiera,

ciudadano,

lo haga cada día más insignificante,

que le quite todo lo que tiene,

sus propiedades,

las conquistas sociales-políticas que ha obtenido en el pasado,

el Estado nos cerca por todas partes,

es un gigantesco pulpo rojo rojito,

que estrangula al ciudadano,

dándole dádivas,

miserables limosnas,

para crearle una apariencia de riqueza,

Quiero ser yo el que decida mi vida,

no el Estado omnipotente,

que se cree sabio,

se cree justo,

no quiero que el Estado piense por mi.

Qué vergüenza dan los militares Venezolanos,

¿se sentirán herederos de la Gloria del ejercito libertador?.

Les queda muy grande la palabra libertad y conciencia,

siento más bien que lo pulverizan,

lo dividen para someterlo,

el ejército libertador está completamente castrado,

sometido a una ideología inconexa pero peligrosa,

no puede ser el ejército que comandó el gran hombre de América,

que generaba libertad a su paso,

ahora estamos cercados por una ideología extraña,

socialismo viviendo en un capitalismo salvaje,

con todos los signos de una degradación social.

Los militares están para defender la Patria, ¿lo están haciendo?

estamos cercados por la guerra de Colombia y las FARC,

parece nuestro territorio una tierra de nadie,

paso obligado del ELN, FARC,

paramilitares y pare usted de contar.

¿Para qué existe el Ejercito heredero de la gloria del Libertador,

Es mi país, Venezuela, con el cielo más azul de América,

si no hace respetar su soberanía?.