El miércoles 19 del pasado mes de agosto, el rey Mohamed VI dirigió un discurso a la nación,   con motivo del 62 aniversario de la Revolución del Rey y del Pueblo, y en relación con las próximas elecciones a celebrar el próximo día 4 de septiembre en todo el reino, resaltó a los ciudadanos que “como representantes electos están  en el centro de la " nueva revolución " que Marruecos va a comenzar”.

Una vez más con sus palabras ha inspirado  un sincero espíritu de sacrificio y patriotismo condensándolo en la importancia y responsabilidad de los electores para la consecución de una “revolución social” en beneficio del futuro Marruecos de acuerdo con las prerrogativas que son concedidas por la nueva Constitución y en virtud de las amplias competencias de los consejos regionales y las entidades locales.

Todo ello en una amplia referencia y con un explícito argumento dialéctico, para llegar a todas las capas sociales y recalcar que las instituciones están al servicio del pueblo y no el pueblo al servicio de las instituciones.

Del resultado de la voluntad popular depende que la Administración se involucre en el cumplimiento de sus proyectos y le atañe la responsabilidad de mejorar sus servicios y prestaciones a los ciudadanos. Todo ello, ha recalcado S.M. el rey, como base fundamental para la aplicación de la regionalización avanzada, como ya hizo constar en otras ocasiones y construir un verdadero y sólido pilar para conseguir la unidad nacional de Marruecos y su integridad territorial.

  Foto MAP 

Como muestra de su talante democrático ha exhortado a los ciudadanos a su asistencia y participación masiva en los comicios, como garantía de un mejor resultado en los mismos, y ha querido insistir que su intervención debe ser de acuerdo con sus principios y libertad de pensamiento, teniendo en cuenta la seriedad, calidad y realismo de los programas,    no dejándose influir ante situaciones u ofrecimientos utópicos o seductores que después no se puedan realizar.

Del resultado de la voluntad popular depende que la Administración se involucre en el cumplimiento de sus proyectos

En el aspecto del servicio al ciudadano, hizo referencia al aspecto religioso de la convivencia alertando del incremento de los extremismos que se presentan en nombre de la religión, amén del aumento de las bandas terroristas.  Marruecos en se involucra internacionalmente en luchar contra esta lacra y por ello se ha visto obligado a tomar una serie de medidas preventivas con el fin de proteger su seguridad y estabilidad y aun lamentándose por ello, se ha impuesto el visado a algunos ciudadanos de determinados países árabes, particularmente de Siria y Libia, no dejando de expresar la solidaridad con estos pueblos.

Marruecos ha mostrado una permanente preocupación por preservar la seguridad interior y la de sus fronteras alcanzando un gran nivel “gracias a la conjunción de esfuerzos de todos los aparatos y fuerzas concernidas”.   

Por último S.M. hizo una mención especial a la población inmigrante que no ha alcanzado en el país las condiciones adecuadas para su subsistencia y perviven en condiciones de precariedad, insalubridad y mendicidad en algunos casos, por lo que ha invitado a que los marroquíes traten a dichas personas con la hospitalidad que les caracteriza, pero haciéndoles saber que “deben ajustarse a las leyes marroquíes y respetar los valores sagrados religiosos y nacionales, principalmente la doctrina sunní malikí” y naturalmente respetando las leyes y normativas marroquíes.  Todo ello dando prioridad a las “necesidades internas, cuyo tratamiento acapara nuestros esfuerzos”.  La salvaguarda de la seguridad y estabilidad del país, “no sólo compete al Estado y a las instituciones, sino que también es un deber de los ciudadanos”.

Por último ha evocado a Dios en gratitud por “las virtudes de fidelidad y cohesión del pueblo marroquí con su Trono, y el celo sincero por su unidad e integridad territorial”. Todo ello, “con el fin de seguir portando la antorcha de la renovada Revolución del Rey y del pueblo, por un Marruecos de la unidad y de la solidaridad, de la seguridad y del progreso”.

Este “Fórum Canario Saharaui”, saluda nuevamente los deseos infundidos del monarca a los ciudadanos marroquíes, con la esperanza de su cumplimiento y la saludable divulgación de sus propósitos democráticos que redundarán una vez más en el bienestar y la prosperidad de la nación. 

Sus palabras han inspirado un sincero espíritu de sacrificio y patriotismo condensándolo en la importancia y responsabilidad de los electores

Las Palmas a 1 de septiembre de 2015