Hoy en el Camp Nou se juega un partido de fútbol, pero hay gente que ve más que un partido, que pretende utilizar un evento deportivo de una magnitud mundial para sus propios intereses.Que no va a representar a su club ni a defender unos colores, sino que pretende utilizar este evento como medio de divulgación de unos intereses políticos a los que nunca debería estar asociado el deporte.No importa la nacionalidad, no importa la creencia, la religión, lo único que debe tener una magnitud significativa esta noche en el Nou Camp es el balón, la pasión y defensa de los colores de dos equipos que deben representar lo que transmite el deporte:ética, compañerismo, trabajo, sufrimiento, sacrificio, lucha, fe;estos son sólo algunos adjetivos que reflejan la verdadera esencia de lo que debe ser una práctica deportiva, y nunca un medio para representar unos intereses propios o comunitarios por encima de la deportividad.

Creamos en que hoy millones de personas en todo el planeta de distintas culturas estarán pendiente de como 22 futbolistas, sólo eso, futbolistas, no hacen disfrutar, nos hacen sufrir y gritar, nos hacen felices aunque sólo sea durante noventa minutos, y olvidemonos de todo lo demás.