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Luego de una audición en la que participaron alrededor de cuatro mil alumnos, unos 357 niñas y niños quedaron seleccionados para conformar la Orquesta Sinfónica Nacional Infantil de Venezuela.
El Centro Académico Infantil de Montalbán, ubicado en el suroeste en la capital venezolana, albergará durante ocho horas diarias a los niños de la orquesta, tiempo en el que trabajarán en un repertorio de alta exigencia técnica a estrenarse en el próximo mes de julio a propósito de celebrarse el Bicentenario de la Independencia de Venezuela.
‘ En nada se parece al repertorio que hoy ensaya esta orquesta al que se trabajó en 1984, cuando, con 12 años, yo formaba parte de la Infantil. Estos jóvenes a quienes he tenido la fortuna de dirigir hoy con piezas que, en nuestro momento, interpretamos cuatro años después de habernos constituidos, son una promesa musical’ , dijo el reconocido director de orquestas, Gustavo Dudamel.
Los ensayos cuentan con el apoyo de 27 maestros que a su vez reciben la tutoría diaria del músico venezolano y distinguido maestro, José Antonio Abreu.
El repertorio está compuesto por la Primera Sinfonía de Gustav Mahler, la Obertura de 1812 y el poema sinfónico Francesca da Rimini del compositor ruso Piotr Ilich Tchaikovsky.
La Sinfónica Nacional Infantil, adscrita a la Fundación del Estado para el Sistema Nacional de las Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela (Fesnojiv), invitó a las audiciones nacionales en las primeras semanas del mes de enero, bajo la consigna: ‘ Muchacho no mayores de 15 años capaces de tocar Francesca da Rimini’ .
Los niños seleccionados participan en un seminario dictado por Abreu y Dudamel, que culminará este martes. Respecto a esa actividad, el maestro venezolano, expresó que representa el primer encuentro de más de tres centenas de jóvenes de entre 7 y 15 años, que provienen de estratos sociales humildes.
En el seminario, ‘ la música se constituye en fuente de desarrollo de las dimensiones del ser humano que elevan su condición espiritual y los conduce a un desarrollo integral de su personalidad’ , señaló José Antonio Abreu.
‘ De tal manera’ , agregó, ‘ en estos muchachos se dan inmensas ganancias intelectuales y afectivas, entre otras la adquisición de principios de liderazgo, de enseñanza, de capacitación, de sentido de compromiso, de responsabilidad, de generosidad y entrega a los demás’ .