El Banco Mundial hará "todo" para colaborar con los nuevos actores de desarrollo, especialmente con el nuevo Banco Asiático de Inversiones en Infraestructura (BAII), creado por iniciativa de China, afirmó el martes su presidente, Jim Yong Kim.

"Somos testigos de la emergencia de un nuevo actor importante en el campo del desarrollo con el BAII creado por China con más de 50 países miembros", afirmó Kim en un discurso en Washington el martes, una semana antes de las reuniones de primavera del Banco Mundial y del FMI en la capital estadounidense.

"Haré todo lo que esté a mi alcance para encontrar maneras innovadoras de trabajar" con esta institución y el Banco de Desarrollo creado por los miembros del Brics (Brasil, Rusia, India, China, y Sudáfrica), agregó.

El BAII y el Banco de Desarrollo de los BRICS "tienen el potencial de convertirse en nuevas fuerzas importantes para el desarrollo de los países pobres y emergentes", dijo Kim, que los calificó de "sólidos aliados potenciales".

Asimismo, indicó que tenía la intención de continuar la próxima semana en Washington las conversaciones con "los funcionarios chinos en especial sobre estas posibles colaboraciones".

El presidente del Banco Mundial dijo que los países en desarrollo tenían necesidades de inversión en infraestructura estimadas en entre 1 y 1, 5 billones de dólares cada año para carreteras, puentes, aeropuertos, centrales eléctricas o de energía y plantas desalinizadoras.

"Para 2030, necesitaremos sin duda 40% más de energía al tiempo que enfrentaremos un déficit de 40% de agua dulce", dijo.

Kim reafirmó los objetivos del Banco Mundial, que quiere lograr la erradicación total de la pobreza en el planeta para el año 2030.

"Somos la primera generación en la historia de la humanidad que puede acabar con la pobreza extrema", lanzó, cuando 1.000 millones de habitantes viven con menos de 1, 25 dólar por día.